Acude a nuestra consulta un caso de una gata atropellada recogida por una protectora. El caso es remitido por una compañera veterinaria. Se trata de una gata atropellada que ha tenido la mala suerte de presentar heridas de arrastre en la cara y tiene labio, mentón y comisuras labiales descolgadas.

Lo primero que hacemos en el centro es desbridar y limpiar la herida, preparándose a la paciente para cirugía en una semana. Cuando la herida está limpia y bajo anestesia general, se realiza la reconstrucción facial.

Tras dos meses de laboriosas curas y un manejo médico correcto por parte de la compañera que nos remitió el caso y de las voluntarias de la protectora, la reconstrucción facial ha tenido éxito. La gata come, bebe y abre y cierra la boca de forma completamente normal.

Aspecto inicial del labio de la gata atropellada